Los agricultores de la Axarquía malagueña recurren a esta antigua técnica para evitar plagas y que se sequen mangos y aguacates.
Tan antigua como encalar las casas para repeler los rayos de sol, es la técnica que emplean algunos agricultores de Málaga para evitar que se sequen sus árboles.
Propietarios de plantaciones de mangos y de aguacates en la Axarquía han optado por cubrir con cal los troncos de sus frutales para protegerlos mientras dure la sequía.
Es un método que se utiliza en el campo para proteger los árboles y arbustos de las radiaciones ultravioletas del sol, pero también para evitar el agrietamiento y como repelente de insectos.
La situación en esta comarca es casi dramática. Con restricciones en el riego, muchos agricultores están arrancando árboles. Otros se plantean vender sus tierras.
Ya no se trata de salvar los cultivos, dicen los agricultores, conscientes de que ya está perdida la cosecha de este año, sino de salvar los árboles, muy dañados por el estrés hídrico que padecen.