Miguel Delibes de Castro, presidente del Consejo de Participación del Espacio Natural Doñana, ha alertado de que no solo el cambio climático, sino también la extracción ilegal de agua subterránea están dejando seca esta Reserva de la Biosfera.
Se está celebrando estos días la conferencia sobre clima de la ONU que se ha organizado en la ciudad egipcia de Sarm El Seij y traído a Andalucía uno de los principales efectos del cambio climático se está notando en Doñana.
Para hablar de lo que está pasando en este territorio Reserva de la Biosfera ha estado en Días D Andalucía el biólogo Miguel Delibes de Castro, presidente del Consejo de Participación del Espacio Natural Doñana, quien ha admitido que las lagunas del Parque se están secando "por el cambio climático pero también por la extracción de agua subterránea".
El último humedal que sobrevivía a la sequía que asola Doñana ha desaparecido. Se ha secado la laguna de Santa Olalla, la más grande de las permanentes. Un panorama que lleva a Delibes a lanzar un SOS y manifestar de forma tajante que "Doñana puede desaparecer" porque "cada vez llueve menos y hace más calor", con lo que el Parque "se parece cada vez más al norte de África".
En Doñana, alerta Delibes, lleva más de una década lloviendo menos de lo habitual. "Llevamos once o doce años viendo como llueve menos de lo esperado. Cuando llegué a Doñana hace medio siglo había algún año de sequía, pero era algo excepcional, sabíamos que al siguiente llovería, pero once años de sequía lo están trasformando todo", ha explicado. De ahí que reclame medidas como "suprimir la extracción de agua subterránea para que no disminuyan los acuíferos y otras más complicadas como permitir más sedimentación para que se eleve el suelo porque el nivel del mar sube y Doñana, que está bajita se queda afectada por las mareas llegando agua con demasiada sal".
La pérdida de Doñana si no se hace nada sería para quien fuera director de la Estación Biológica como "un enorme fracaso social".