La Junquera ha reabierto este sábado pero la mayoría se encuentran muy desviados de su ruta y aún tardarán en poder volver.
Es el caso de las empresas de transporte del eje de la nacional cuarta, en Jaén.
Los transportistas almerienses intentan llegar a su destino.
La situación en Francia tiende a calmarse este sábado tras las protestas de los agricultores galos que que en los últimos días han obligado a cortar el tráfico por la autopista AP-7 en la frontera entre España y Francia por La Junquera, un paso que ha quedado abierto este sábado por la mañana.
La AP-7 ha quedado abierta hacia las 11 de la mañana en la frontera de La Jonquera en ambos sentidos, y aunque se mantienen 2 kilómetros de retenciones en la salida 3 ya no se desvía obligatoriamente todo el tráfico por esta salida. La circulación se cortó el viernes al mediodía y eso obligó a que transportistas pasaran la noche esperando a la reapertura de la frontera en parkings y áreas de servicio de La Junquera y pueblos cercanos.
Desde hace un poco más de una semana, decenas de barricadas han paralizado la circulación en cientos de kilómetros de autopistas y, desde la primera hora de este viernes, se llegaron a cortar algunos de los principales ejes de acceso a París. Hasta este viernes, la intención de las principales centrales era bloquear París porque consideran que la oferta del gobierno de Macron es insuficiente.
Pero por el momento este hecho no se ha producido. Esta relativa calma da por tanto un alivio a los transportistas españoles, muchos de ellos andaluces para los que esta frontera se ha convertido en una ratonera esta semana.
Las movilizaciones de los sindicatos agrícolas franceses bloquearon las principales carreteras del país en un 'viernes negro' para la movilidad, que ha obligado a cortar el tráfico por la autopista AP-7 en la frontera entre España y Francia por La Jonquera. Además, la Gendarmería francesa cortó en ambos sentidos la autopista A9 en El Pertús. Desde poco después de las dos de la tarde, además, los manifestantes bloquearon las salidas de París, con barricadas en cinco puntos estratégicos a las afueras de la capital.
LOS CAMIONES ANDALUCES INTENTAN RECUPERAR EL TIEMPO
Incertidumbre en Bailén, Andújar y Guarromán, donde están las principales empresas de transporte de mercancías. Es el caso de Dúpertrans, una empresa de Bailén, especializada en rutas internacionales Europeas, que todavía tiene a dos de sus conductores atrapados en Francia. Tenía tres, pero uno de ellos, Miguel López, ha conseguido salir y ha llegado esta mañana. Lo ha logrado conduciendo de noche.
Oscar, sin embargo, sigue buscando salidas de momento sin éxito. Siguen desviándole incluso por rutas prohibidas para los camiones.
Los empresarios, por su parte, no saben decirle a sus clientes cuándo les llegará la mercancía pero que, sobre todo, están preocupados por la seguridad de unos conductores que se sienten metidos en una ratonera. Máximo Pascual es el dueño de Dupertrans.
Los conductores que aún están bloqueados en Francia esperan poder llegar entre esta noche y mañana. Tras dos días de retraso dando vueltas intentando buscar una salida que les devuelva a casa.
A pesar de la apertura de la frontera en la Junquera, los transportistas que intentan llevas las hortalizas de Almería a los mercados europeos siguen atrapados a pocos kilómetros. Las pérdidas económicas ya son evidentes y ahora la esperanza está puesta en que las mercancías no se echen a perder y lleguen a destino, aún con retraso
En esta situación están todos los transportistas internacionales de la provincia de Almería. Han podido pasar la Junquera, pero ahora el colapso está al otro lado, en puntos como Perpignan. Los que han podido entregar en Holanda o Alemania sus hortalizas, lo han hecho con dos y tres días de retraso
Ya hacen cuentas de las pérdidas económicas. Al igual que los agricultores, han bajado los precios, y aún así no pueden dejar la producción en el invernadero. La incertidumbre es saber si podrán cubrir sus compromisos si siguen la huelga y los piquetes.