En pleno control de alcoholemia llega una pareja pidiendo ayuda porque la niña estaba inconsciente.
Cuando les escoltaban al hospital el coche de la familia se avería.
Les suben al patrullero y llegan a urgencias a toda velocidad.
Janet tiene 17 meses y ya se ha recuperado.
Todo ocurrió en la víspera de la Nochebuena.
Sus protagonistas lo han vivido como una especie de milagro de la Navidad. Ha ocurrido en Bormujos, en el área metropolitana de Sevilla. Unos agentes de la Policía Local han salvado la vida a una bebé, cuyos padres pidieron ayuda desesperados porque la pequeña empezó a convulsionar y se quedó sin conocimiento, y a la postre, el coche familiar se les averió de camino al hospital.
Ocurrió el 23 de diciembre, a las nueve de la noche. Los agentes habían montado un control de alcoholemia a la entrada del pueblo. A los pocos minutos, aparece una pareja joven, con una bebé en el coche. Estaban desesperados. La pequeña tenía 41 de fiebre y está convulsionando.
Los dos coches de Policía Local dejan el control y escoltan a la familia al hospital, pero en el camino se avería el vehículo de los padres, que se montan en el patrullero y consiguen llegar a toda prisa hasta las puertas del hospital San Juan de Dios de Bormujos.
Janet, de 17 meses, fue atendida por los servicios de urgencia. Se recuperó en pocas horas y sus padres ahora no saben cómo agradecer la labor de estos policías locales, que entendieron sin dudar cuál era la prioridad.