El alcalde de la localidad sevillana y ex trabajador de la mina, Juan José Fernández, es una de las voces que ha participado en esta puesta en común de lo ocurrido el 25 de abril de 1998. Junto a él,hemos escuchado al entonces director de la Estación Biológica de Doñana, Miguel Ferrer.
"Sin mina no hay progreso y futuro en Aznalcóllar" ha dicho Fernández en Despierta Andalucía
Han pasado 25 años del vertido de Aznalcóllar. La madrugada del 25 de abril de 1998 reventó la presa de la balsa con vertidos tóxicos de la mina que contaminaron los ríos Agrio y Guadiamar en la provincia de Sevilla. Un vertido de aguas ácidas y metales pesados que afectó a casi cinco mil hectáreas de zonas agrícolas y pastizal. Las tierras colindantes al Guadiamar se perdieron para siempre para el cultivo. Despierta Andalucía analiza con expertos y testigos lo ocurrido.
Juan José Fernández, alcalde de Aznalcóllar y minero en la fecha del desastre, ha explicado que con el cierre de la mina se fue la principal fuente de empleo del pueblo. "Lo primero que intentamos fue evitar tragedias humanas y después lo que nos preocupaba era como poner de acuerdo a todo el mundo para limpiar lo antes posible. Dar las gracias a todos los científicos, a Doñana, a los políticos que se pusieron de acuerdo y en cuatro días aquí estaba todo el mundo remangado", ha dicho.
El alcalde destaca lo recuperada que está la zona 25 años después. "Fue la primera crisis. En Aznalcóllar vivimos de la minería", ha dicho. "Aznalcóllar está triplemente sufriendo la crisis. La minería del siglo XXI es distinta, sin balsa, que se abastezca de su propia agua y que no ponga en riesgo ningún afluente. Pero en Aznalcóllar no hay futuro ni progreso sin minería", ha insistido y recalca que la mina que se va a abrir próximamente va hermanada con el medio ambiente y supondrá 2.000 empleos. "Necesitamos esta mina pero con todos los parámetros que Europa y España tiene gracias a ese accidente. Aprendimos mucho con lo que ocurrió en Aznalcóllar", ha manifestado.
El entonces director de la Estación Biológica de Doñana, Miguel Ferrer, ha explicado que si el desastre hubiera ocurrido de día se habría cobrado bastantes vidas humanas. Ferrer asegura que lo recuerda todo con confusión. "Analizado después, las decisiones que se tomaron fueron las correctas pero la incertidumbre era enorme. Todos querían ayudar pero no sabían como", ha dicho y ha recordado la imagen de los peces saltando del agua "porque preferían morir asfixiados que abrasados"
Flora y fauna quedó arrasada. 25 añod después se puede decir que el nivel de respuesta fue proporcional y que la labor de limpieza ha sido la mayor conocida en Europa. "Fueron tres años de limpieza y los niveles de contaminación en Doñana son un poco más altos de lo que eran antes pero muy lejos, afortunadamente de los niveles de preocupación", ha explicado.
Hierro, Zinc, arsénico son algunos de los contaminantes que se vertieron al agua. "Eran tóxicos, cancerígenos y mutagénicos. una generación después empezaron a nacer cigüeñas con el pico hacia arriba y se detectaron daños en muchas especies", lamenta Ferrer.
En Despierta Andalucía también ha participado el periodista medioambiental de Canal Sur, José María Montero, una voz fundamental para conocer el antes y después de la rotura de la balsa de residuos tóxicos.