El proyecto para conectar la capital con el puerto granadino fue aceptada por la Eurocámara en abril pero ahora ha sido excluida de la revisión del plan de infraestructuras, que planifica los proyectos que recibirán fondos comunitarios hasta 2050.
Las autoridades de la Unión Europea han alcanzado esta semana un acuerdo para la revisión de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T), que marca las prioridades para el desarrollo de infraestructuras en los próximos años. Una revisión que no da prioridad al tren de Motril.
La Comisión Europea de Transportes ha hecho decaer la enmienda promovida por el Grupo Socialistas en la Eurocámara para incluir en la RTE-T el ramal Granada-Motril.
Entrar en la planificación de la Red Transeuropea permite permite aspirar a fondos comunitarios para la construcción de una infraestructura que, según el informe de viabilidad que encargó el Puerto de Motril, tendría un coste de entre 30 y 40 millones de euros el kilómetro.
La revisión de la RTE-T establece un nuevo calendario de actuaciones que establece que la red básica de comunicaciones europea -de la que forma parte el Corredor Mediterráneo pasando por Granada desde Antequera hasta Almería- deberá estar terminada en 2030. El acuerdo establece que la ampliación de la red básica tendrá que estar lista en 2040 y la red global en 2050.
Es decir, lo que han aprobado las autoridades europeas no incluye planes de obras nuevas propuestos por los estados miembros como el del tren Granada-Puerto de Motril, en el que también estaba incluida la mejora de la conexión Granada-Córdoba a través de Jaén, a pesar de que esta propuesta fue aprobada por el Parlamento Europeo el pasado mes de abril.
La exclusión del tren a Motril de la planificación de infraestructuras europea ha sentado como un jarro de agua fría en administraciones y entidades locales y andaluzas. La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Rocío Díaz, ha lamentado que “se ha perdido una gran oportunidad.
Díaz ha señalado que la Junta de Andalucía, de la mano de entidades y parlamentarios europeos, había apoyado abiertamente unas enmiendas que fueron aprobadas en el Parlamento europeo encaminadas a aprovechar al máximo "el potencial que tiene nuestra tierra y vertebrar Andalucía, por fin, por tren".
Al tratarse de un acuerdo provisional que todavía debe pasar por el Parlamento Europeo, la consejera asegura que desde el Gobierno andaluz van a insistir para que "se atiendan las legítimas reivindicaciones, como que el Puerto de Motril deje de ser el único puerto de interés general del Estado sin conexión ferroviaria o que incluyan la terminal intermodal de San Roque, en el Campo de Gibraltar, dentro de la red básica".