tragedia en el mar
tragedia en el mar

El marinero de Huelva, identificado entre las víctimas del barco naufragado en Terranova

Tanto ellos como los nueve fallecidos que se han encontrado serán trasladados el domingo a España en un avión militar fletado por el Gobierno de la Nación.

 Un avión militar se encargará de la repatriación. El Gobierno ha decretado el lunes día de luto oficial.

Los familiares de los 12 desaparecidos, entre ellos un pescador de Huelva, se han concentrado este sábado en Marín para pedir que continúe la búsqueda.

CANAL SUR MEDIA 19 febrero 2022

El marinero y patrón de pesca Juan Antonio Cordero, natural de Lepe (Huelva), ha sido identificado entre las víctimas mortales del barco 'Villa de Pitanxo' que naufragó esta semana en aguas de la isla de Terranova (Canadá). Según han informado a EFE fuentes cercanas a la familia y de la Junta de Andalucía, Cordero, que estaba desaparecido, se encuentra entre las personas fallecidas.

A un mes de jubilarse con 55 años, Cordero, que estaba casado y con dos hijos, era el segundo patrón del barco y sus desplazamientos a Galicia eran solamente para embarcar, pues este onubense mantenía la residencia en su Lepe natal. Sus restos llegaban esta mañana al puerto de San Juan de Terranova junto al resto de las víctimas rescatadas y los tres únicos supervivientes. Un avión militar se encargará de la repatriación. El Gobierno ha decretado el lunes día de luto oficial.

LLEGAN LOS SUPERVIVIENTES
Los tres únicos supervivientes del 'Villa de Pitanxo' ya están en tierra. Han llegado este sábado por la mañana a Terranova, en Canadá, junto a los cuerpos de siete de los marineros fallecidos en el naufragio. Los otros dos cuerpos llegaron el viernes a puerto.

Todos regresarán el domingo a España en un avión militar fletado por el Gobierno de la Nación. Los familiares de los desaparecidos se han concentrado este sábado en Marín (Pontevedra), donde tenía su base el barco. Piden que continúe la búsqueda.

Los tres supervivientes son el patrón del barco, Juan Padín, y su sobrino, Eduardo Rial Padín, y el joven ghanés Samuel Kwesi, residente en Marín. En el barco viajaban 24 personas.

Los familiares de los desaparecidos en el pesquero se enfrentan a una serie de tramites burocráticos para cobrar pensiones o seguros. Pero la legislación ha avanzado en los últimos años y ya no tienen que esperar tanto para que se les reconozcan sus derechos. 

Y es que hace unos años las familias de los desaparecidos en un naufragio tenían que sumar a su dolor una larga espera de al menos 10 años para poder recibir prestaciones y compensaciones económicas. En 2000, se cambio la ley, y el derecho a las pensiones de viudedad y orfandad se reconoce casi inmediatamente. De este modo, aunque la ley fija tres meses en casos de siniestros para declarar el fallecimiento, cuando se trata de un naufragio los plazos se acortan.

ES NOTICIA