La jornada empieza a las siete y media de la mañana y termina a las dos y media de la tarde.
Se trata de minimizar los riesgos de trabajar bajo los rigores del calor
La medida beneficia a medio millón de trabajadores
Desde este lunes los trabajadores de la construcción tiene horario reducido de siete y media de la mañana a dos y media de la tarde. Aunque no en todas las provincias andaluzas se ha cerrado un acuerdo entre patronal y sindicatos para fijar esa norma.
Los albañiles realizan las tareas más duras a primera hora de la mañana en el exterior sin olvidar hidratarse.
Otros trabajadores que realizan su labor en la calle como jardineros o agricultores también deben ser protegidos cuando hay alerta roja o naranja con el decreto que aprobó el Gobierno en mayo, que incluso contempla suspender sus funciones. En Andalucía afecta a medio millón de personas.