Pueden ser transmisores del virus, de ahí la importancia de protegerlos también a ellos. Se trata de una vacuna preventiva, no curativa, que ya se inocula a las niñas, y que a partir de enero se incorporará para los niños de 12 años.
El Papiloma Humano es un virus, que agrupa unos 200 tipos diferentes, de los que unos 40 pueden infectar la zona genital, la boca y la garganta.
Estos tipos de papiloma humano se transmiten durante el contacto sexual. De hecho, es la enfermedad de transmisión sexual más común. La mayoría de las infecciones genitales no hacen daño y desaparecen solas. Sin embargo, algunos tipos del virus pueden causar verrugas genitales o cáncer de cuello uterino o vulva, vagina, pene, ano, boca y garganta.
El papiloma de alto riesgo puede tratarse fácilmente antes de que se convierta en cáncer. La mejor protección es la vacuna. También es importante hacerse la prueba del papiloma humano y una citología vaginal regularmente.
La vacuna se incluye en el calendario vacunal infantil de las niñas. Vacunar también a los varones es un paso más para frenar el virus. Se tienen en cuenta así las recomendaciones del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría. Se trata de una vacuna preventiva, no curativa y por ello se recomienda que se administre antes de la primera relación sexual. Las mujeres son las más vulnerables, al poder desarrollar cáncer de cuello de útero, pero los varones pueden ser transmisores de ahí la importancia de protegerlos también a ellos.