En Córdoba han aparecido varios cadáveres de aves junto junto al Guadalquivir en la capital y en Sevilla, se ha cerrado el parque de María Luisa al detectar cinco patos muertos.
Personal de la Junta de Andalucía investiga en estos momentos el hallazgo de varios cadáveres de especies de aves en una zona cercana al río Guadalquivir a su paso por Córdoba capital.
Según han informado desde el Gobierno regional, se han desplazado al lugar agentes de Medio Ambiente y técnicos de la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía (Amaya).
Al respecto, han apuntado que dichos agentes y técnicos enviarán los cadáveres al centro de análisis de Málaga y esperan que en unos cinco o seis días estén los resultados sobre la muerte de dichas especies.
Además, las fuentes del Ejecutivo autonómico han aclarado que a esta hora no hay registrados casos de gripe aviar en la provincia.
También el Ayuntamiento de Sevilla ha decretado el cierre preventivo del Parque de María Luisa tras la aparición de cinco patos muertos y siguiendo el protocolo de coordinación con los ayuntamientos para la vigilancia y control de influenza aviar en parques urbanos y periurbanos de Andalucía, elaborado tras detectarse un foco de gripe aviar en el Parque del Tamarguillo de Sevilla, que se ha saldado hasta el momento con casi 80 aves muertas.
Este protocolo del que este miércoles tomaba conocimiento el Consejo de Gobierno de la Junta establece que cuando se detectan tres o más cadáveres de aves en un mismo espacio y no se conozca su causa en un periodo inferior a 24 horas, se debe comunicar al Ayuntamiento y este valora la actuación pertinente y, en su caso, contacta con las autoridades de la Junta.
Desde el Gobierno local se ha anunciado que tras la retirada de los cadáveres de los cinco ejemplares, hallados en el estanque de los patos, se procederá a la limpieza y desinfección de la zona siguiendo el citado protocolo, que recuerda que la responsabilidad en la ejecución y mantenimiento de estas medidas recaen en primer lugar en los titulares de estas zonas verdes, en conformidad con las distintas normativas de salud pública, de sanidad animal y de bienestar animal.
No es el primer cierre que se produce en zonas verdes puesto que hace justo una semana el Ayuntamiento hacía lo propio con los jardines del Real Alcázar y el parque de Miraflores después del hallazgo de aves muertas; en concreto, una pava real y un pato en el recinto monumental y tres gansos en el parque de Miraflores.