Salud responde a las protestas pidiendo el apoyo sindical para reclamar financiación al Gobierno

Cientos de trabajadores sanitarios y delegados de los sindicatos Satse, Csif, CCOO y UGT se han movilizado este jueves a las puertas de los servicios centrales del Servicio Andaluz de Salud (SAS) en Sevilla para exigir a la Junta de Andalucía el cumplimiento de los acuerdos en materia de mejora del sistema público y de las condiciones laborales de las plantillas sanitarias.

La protesta se produce después de una reunión que califican de fallida con la consejera de Salud y Consumo Calina García, y como preámbulo del paro de tres horas convocado para el próximo 26 de junio.

La consejera ha instado a los sindicatos a ser “responsables” y les ha pedido “hacer piña” con su departamento para reclamar conjuntamente al Gobierno central una “financiación justa” para que Andalucía pueda destinarla “a lo que le importa a la gente, como la salud”, ha dicho.

Catalina García ha reiterado que en la reunión mantenida este miércoles con los sindicatos trasladó a sus representantes que la Junta “va a seguir trabajando con ellos y sus reivindicaciones en la Mesa Sectorial”, aunque descartó comprometerse en ninguna fecha concreta. 

Por su parte, las organizaciones sindicales reclaman el “desarrollo completo” del Pacto por la Mejora de la Atención Primaria, suscrito en 2023, que incluyen medidas que beneficiarán directamente a la asistencia que se presta a los ciudadanos, una situación similar en la que se encuentra el nuevo modelo de carrera profesional pactado en la Mesa Sectorial de Salud.

En cuanto a la reunión de este miércoles con la Consejería, los representantes sindicales lamentan que acabara “sin soluciones concretas y reales”.

Antonio Macías, de UGT Andalucía, ha asegurado que “no tenemos más remedio que protestar y buscar interlocutores válidos para llegar a  acuerdos con los que mejorar la grave situación de la sanidad” y ha lamentado que le ha presentado la Consejería en la última reunión es “un escrito de adhesión a una supuesta petición de mayor financiación  al Gobierno. Las guerras políticas no son el problema que tiene la  sanidad”, ha criticado.

Por parte de CCOO-Andalucía, José-Pelayo Galindo ha calificado de  “insólito” que los sindicatos tengan que “exigir a la Administración  que cumpla con lo que ha firmado”. Califica la reunión con la consejera de “esperpéntica” y de “grupo de terapia porque nos escuchó pero no presentó  propuesta”. 

Victorino Girela, de CSIF-Andalucía, también acusa a la Junta de incumplir los acuerdos. “Nos piden que confiemos pero no hay soluciones concretas ni reales”, ha dicho Girela, que ha recalcado que los sindicatos “seguiremos en  la calle hasta que esto se solucione”. En relación con el escrito  presentado por la Consejería de Salud para reclamar al Gobierno central  mejor financiación, el sindicato Csif-Andalucía ha asegurado que “por  supuesto que hay que mejorarla, pero la consejera es responsable de  la sanidad andaluza”. 

Y desde el sindicato Satse, José Sánchez asegura que este verano en Andalucía habrá 2.500 camas hospitalarias menos y ha alertado “un caos” que se va a  producir en los próximos meses. También ha expresado sus dudas sobre la posibilidad de poder contratar para el verano a los médicos del MIR de Familia que no terminarán su formación hasta septiembre, una de las medidas que propone la Consejería de Salud al Ministerio para paliar el déficit de médicos durante la temporada estival. 

La consejera de Salud ha insistido este mismo jueves a los sindicatos en que “entendemos sus reivindicaciones y las respetamos y la obligación de esta Consejería va a ser seguir trabajando”, pero les ha pedido que sean “conscientes” de que Andalucía “está infrafinanciada” y les ha instado a “hacer fuerza” con la Junta para que “den a la comunidad la financiación justa y que le corresponde”.

En cuanto a la reunión con los sindicatos, la consejera asegura que les realizó propuestas como “un cambio radical” en la bolsa única del SAS para “tener de verdad una bolsa actualizada de manera inmediata y que los profesionales puedan ser contratados y ver sus notas”.

Catalina García ha reconocido que será un verano “dificultoso” y ha reiterado que son 500 plazas de médicos de familia las que no están cubiertas en Andalucía y que su intención es que los 369 MIR que terminan su formación en septiembre, de manera voluntaria, puedan ejercer en el sistema público este verano.