Con todo, aún tienen buenas expectativas sobre la marcha de la economía.
Esto refleja una encuesta realizada por la CEA y donde dicen estar satisfechas por las ayudas pero muestran su preocupación por debates como la reducción de jornada.
Los empresarios andaluces han mostrado precisamente su preocupación por los riesgos derivados del contexto internacional debido a los aranceles y también por la inestabilidad política nacional.
Si nos fijamos en lo que ocurre en nuestra comunidad, una de cada dos empresas considera que la economía andaluza atraviesa un buen momento y por eso sus expectativas son optimistas. Es lo que han asegurado en una encuesta realizada por la patronal de la región en su sexto barómetro.
Y dan notas, aprobados y suspensos. Las buenas notas son por las ayudas que están recibiendo para su transformación digital, para exportar sus productos o abrir nuevos mercados. Y en tercer lugar por las medidas puestas en marcha para hacer un mejor uso de la energía respetando el medio ambiente.
En los suspensos, en el contexto nacional muestran su preocupación por la incertidumbre institucional con medidas como los debates sobre la reducción de la jornada laboral, la burocracia o la fiscalidad. En segundo lugar, los aranceles y los cambios que se están produciendo y que pueden afectar a sus negocios, y otra de sus preocupaciones es la falta de trabajadores en sectores como la construcción, la tecnología o la ingeniería.