La flor cortada sufre las consecuencias de la suspensión de las procesiones

La flor cortada en Andalucía es uno de los sectores que estos días vive con angustia estos momentos de crisis. Y es que las hermandades y cofradías están cancelando la mayor parte de los pedidos. Una auténtica ruina para esta industria. Lo hemos comprobado en Chipiona, en Cádiz.

Chipiona cuenta con más de trescientas cincuenta hectáreas de invernaderos destinados a la producción de flor cortada. Esta actividad es un pilar muy importante de la economía de la costa noroeste de Cádiz y se está viendo afectada por el coronavirus.

José Antonio tiene una pequeña empresa en Chipiona. Estima las perdidas que va a sufrir en unos cien mil euros. Teme por el empleo de sus trabajadores. El sector de la flor cortada pide ayudas publicas para afrontar esta crisis.

La flor cortada de Chipiona se exporta a Holanda y desde allí se distribuye a otros países europeos como Italia, Alemania o Francia. En primavera tiene un gran mercado andaluz en el ámbito de la Semana Santa. Este año lo perderá en gran medida.