Tajos vacíos y cooperativas cerradas en el inicio de la campaña de la aceituna
Los efectos sobre la economía y el empleo de la mala cosecha son devastadores.
Al cierre de muchas cooperativas se suma la reducción de los horarios en las más grandes.
Pocos tajos de aceituneros en el campo y cooperativas cerradas en plena campaña de aceituna. Así es como está transcurriendo esta corta cosecha en la mayor parte de los pueblos olivareros de Andalucía.
Los efectos sobre su economía son devastadores, según la federación de cooperativas agroalimentarias. A la pérdida del empleo industrial en almazaras como éstas de Torredonjimeno o Las Casillas de Martos, en la provincia de Jaén, se añade la reducción de horarios y de plantillas en otras más grandes y la caída del número de cuadrillas y de trabajadores, por segundo año consecutivo.
Ante esta situación, son muchas las cooperativas que no abren para ahorrar costes y otras en las que sólo se abrirán unas horas para recoger una aceituna que se transportará a otras más grandes.
