Expertos consultados por Canal Sur consideran que el accidente se pudo producir por falta de vigilancia durante la maniobra.
Sin embargo, creen correcta la decisión de llevarlo a Catalan Bay.
Esta situación la generó una maniobra brusca del capitán del barco que se encuentra detenido y está colaborando en la investigación del accidente. Así fue el momento de la colisión: los radares que controlan la actividad marítima desvelan el movimiento del OS35 que le llevó a golpear el metanero Adam.
En el momento del impacto las autoridades portuarias de Gibraltar pidieron que parara pero continuó la navegación hasta la costa este de Gibraltar. ¿Se pudo evitar? ¿Por parte de quien hubo negligencia? Los expertos consultados por Canal Sur consideran que hubo un fallo en la vigilancia del buque. Pasadas las 10 de la noche, los sistemas de seguridad registran las maniobras del buque OS35 para salir de la bahía. Hace un cambio brusco de rumbo y colisiona con el otro barco.
Tras la colisión, la Autoridad Portuaria gibraltareña dirige el barco hacia la cara este del Peñón, más reservada de los embates de la marea. Es allí donde vara la embarcación y donde se trabaja para la extracción del combustible. Los expertos consideran que fue una decisión técnica y acertada. De haberlo llevado a alta mar, el barco se habría partido, hundido a mayor profundidad haciendo más difícil la extracción del fuel.