La exmujer del presunto asesino alertó de su peligrosidad: "Nadie me creyó"
En Hoy en Día hemos escuchado el duro testimonio de la expareja del detenido que le había denunciado en dos ocasiones.
Cuenta que avisó a María Isabel, a sus familiares e, incluso, a la Guardia Civil: "Se podía haber evitado".
El presunto asesino había sido denunciado en 2014 y en 2017, aunque las denuncias estaban inactivas por haber prescrito.
Según la investigación, espero a María Isabel cuando llegó a casa.
los hijos de ella no estaban en casa.
La mujer asesinada este domingo en San Roque (Cádiz) no había presentado ninguna denuncia contra su expareja, el hombre detenido como presunto autor, aunque éste sí había sido denunciado por otras dos parejas anteriores por violencia machista.
En Hoy en Día hemos escuchado el testimonio desgarrador de la exmujer del presunto asesino, con el que tiene dos hijas en común, y entre lágrimas ha explicado que "nadie me creyó" cuando avisó de la peligrosidad de su ex marido. "Lo avisé, lo denuncié dos veces, hablé con ella [María Isabel], avisé a sus familiares y avisé a la Guardia Civil".
"Se podía haber evitado", continúa esta mujer que estuvo casada con el presunto asesino dos años y medio. E insiste en que "nadie me creyó. Creían que era porque quería meterlo en la cárcel y no, es que era peligroso pero nadie me escuchó".
Esta mujer lo denunció en dos ocasiones, una por empujarla y amenazarla de muerte y otra segunda por pegarle en la puerta del colegio de sus hijas, delante de la más pequeña. Hubo un juicio rápido, explica, y "ni siquiera hubo orden de alejamiento". "Y yo tenía que pegar cuerpo pared cuando iba al colegio para verlo venir de frente porque tenía miedo".
El duro testimonio de esta mujer ha acabado con un lamento: el de los tres hijos que deja María Isabel y el de sus propias hijas "con un padre asesino".
MULTITUDINARIA MANIFESTACIÓN
Esta mujer estuvo anoche en la concentración en repulsa por este nuevo crimen machista y protagonizó uno de los momentos más duros. Ella, mejor que nadie, comprendía el dolor de la familia de su vecina asesinada. El pueblo volcado en un gesto de solidaridad multitudinario. Y las administraciones ahora pendientes de la familia. Especialmente de los tres hijos de la fallecida: un chico de 16 años y dos niñas de 7 y 8 para los que han activado un dispositivo especial de psicólogos desde el Instituto Andaluz de la Mujer.
El presunto asesino confesó el crimen a un hermano que vive en Ceuta y le anunció su intención de suicidarse. La Guardia Civil logró detenerlo antes en un hospital de Los Barrios. Por María Isabel, de 37 años, ya no pudieron hacer nada. Su cuerpo, acuchillado, fue hallado sin vida en su domicilio de La Alcaidesa. Unas velas recordaban anoche su memoria en la cafetería que regentaba en San Roque.
DENUNCIAS CONTRA PAREJAS ANTERIORES
La víctima sí había denunciado a otras dos parejas anteriores por violencia de género, según las mismas fuentes, que han informado de que el presunto asesino se encuentra aún en dependencias policiales a la espera de pasar mañana a disposición judicial.
María Isabel M .M., la víctima, se había separado hacía al menos dos meses de su presunto asesino, y al no haber presentado ninguna denuncia contra él no constaba en el Sistema de seguimiento integral de la violencia de género (VioGen).
No obstante, sí había denunciado por agresiones machistas a dos de sus exparejas y padres de sus tres hijos, si bien ambas estaban inactivas tras haber prescrito debido al tiempo transcurrido.
El presunto asesino había sido denunciado en dos ocasiones por agresiones machistas por otras exparejas en 2014 y en 2017, denuncias que también estaban ya inactivas tras prescribir.
Según fuentes de la investigación, María Isabel fue abordada por su expareja cuando regresaba a su domicilio tras pasar todo el día fuera. "Debía de estar esperándola", indican las fuentes.
En ese momento, sus dos hijas menores, de 7 y 8 años, estaban con su padre, y su hijo mayor, un chico de 16, con el suyo.
El suceso tuvo lugar la madrugada del domingo en la vivienda de la urbanización La Alcaidesa de San Roque en la que residía la fallecida.
La Guardia Civil detuvo al presunto autor cuando trataba de lanzarse al vacío desde una planta alta de un hospital en la vecina localidad de Los Barrios, tras haber sido alertados por la mujer del hermano del detenido, al que llamó para confesarle lo sucedido.
