Un buceador avisó del hallazgo. La situación en la que se encontraban colocadas y el estado de las fracturas que presentan hacen suponer que habían sido trasladadas desde otra zona para su posible extracción.
Han sido trasladadas al Centro Arqueológico Subacuático para su tratamiento antes de ser depositadas en el Museo de Cádiz.
La Guardia Civil ha recuperado en San Roque (Cádiz) dos ánforas de unos dos mil años de antigüedad que estaban sumergidas en la playa de Puente Mayorga.
El Grupo de Especialistas en Actividades Subacuáticas (GEAS) y miembros del Centro de Arqueología Subacuática (CAS) lograron extraer las dos ánforas de los siglos I ó II.
Un buceador avisó del hallazgo de un ánfora de grandes dimensiones semienterrada a unos ocho metros de la orilla en la playa de Puente Mayorga.
Los especialistas de la Guardia Civil se desplazaron a la zona e iniciaron una búsqueda por el área indicada por el buceador, hallando finalmente dos ánforas semienterradas, que se encontraban en una zona cercana a costa, con poca profundidad y con buena visibilidad, por lo que el GEAS lo puso en conocimiento de la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía. La colaboración ciudadana ha podido evitar el expolio.
Una vez extraídas las piezas han sido depositadas en los talleres del CAS para que sean sometidas a un tratamiento de estabilización, antes de su traslado definitivo al Museo de Cádiz. Milagros Alzaga, Jefa Centro Arqueológico Subacuático ha querido destacar la importancia de que haya sido un hallazgo casual y comunicado por un ciudadano, algo que demuestra el compromiso de la ciudadanía con el patrimonio.
Se corresponden con dos ánforas incompletas, de época romana, de los tipos “Puerto Real I” -cuya producción está establecida entre la segunda mitad del siglo II d.C. y los primeros años del siglo III d.C.-, y una “Dressel 14” con una cronología que oscila entre los siglos I-II d.C.
Se trata de dos piezas aisladas, fuera de contexto arqueológico, cuya posición secundaria, la situación en la que se encontraban colocadas y el estado de las fracturas que presentan hacen suponer que habían sido trasladadas desde otra zona para su posible extracción.