El Grupo de Combate Expedicionario 'Dédalo' regresa tras dos meses de despliegue en el Atlántico

Después de dos meses de misión, en los que han cruzado en un viaje de ida y vuelta dos veces el océano Atlántico, los buques del Grupo de Combate Expedicionario 'Dédalo-25-3" han regresado a España, tras liderar las operaciones anfibias de un ejercicio de adiestramiento internacional en la costa este de Estados Unidos.

Con sus 700 tripulantes, el 'Galicia', buque de mando del Grupo de Combate Expedicionario 'Dédalo 25-3', y la fragata 'Canarias' han arribado en la mañana de este viernes a la base naval de Rota (Cádiz), mientras que la fragata 'Almirante Juan de Borbón' ha llegado al Arsenal de Ferrol.

Las tres embarcaciones, con 1.230 efectivos, han sido el componente español que ha participado en el ejercicio multinacional UNITAS 25, que ha reunido a 8.000 militares de más de 26 países en Camp Lejune, en Carolina del Norte (EE.UU.), para practicar maniobras que han incluido ejercicios de desembarco anfibio, de combate en poblaciones y en bosque y adiestramiento de tiro, entre otros.

El ejercicio multinacional UNITAS 25 ha sido liderado por la Marina de los Estados Unidos (US Navy) coincidiendo con la conmemoración de su 250 aniversario. El hito de la operación ha sido el desembarco en una playa de la costa atlántica simulando territorio enemigo. 

Se trata del tercer despliegue que realiza este año Grupo de Combate Expedicionario 'Dédalo 25', tras los realizados en aguas de Grecia, entre enero y febrero, y en el Mediterráneo, entre junio y julio.

"Ha sido un periodo muy productivo", ha explicado a su llegada a Rota el contraalmirante Antonio González-Tánago de la Lastra, al frente de esta agrupación naval. Y ha destacado "el compromiso y la voluntad de vencer todas las dificultades" y el "comportamiento ejemplar" de las dotaciones que han participado en estas misiones.

"Los despliegues 'Dédalos' nos permiten demostrar la capacidad expedicionaria de la Armada española, esa capacidad de proyectar una fuerza naval lejos del territorio nacional por un largo periodo de tiempo", con medios aéreos e infantería de marina embarcada, ha subrayado.

Y para desarrollar estas capacidades, el buque 'Galicia' ha afrontado el "reto" logístico de albergar a 700 personas en un buque de 160 metros de eslora desde que salieran de Rota el pasado 25 de agosto para cruzar el Atlántico, llegar a la costa este de Estados Unidos, participar en los ejercicios multinacionales durante dos semanas y regresar.

Un viaje en el que, según destaca la mayoría, una de las mayores dificultades ha sido navegar una semana entre dos huracanes en el recorrido de vuelta.

En las últimas horas antes de su llegada a la base naval de Rota, que la Armada ha compartido con un grupo de periodistas, la dotación ha pasado de vivir la emoción de la despedida de los compañeros y compañeras con los que han convivido estos intensos dos meses a la del recibimiento de sus familiares, parejas e incluso mascotas que les aguardaban en el puerto.