En La línea de la Concepción sus ciudadanos piden respeto para su pueblo y aseguran que solo una minoría se dedica a las actividades del narcotráfico. Algunos consideran que el paro y el dinero fácil inducen, sobre todo a los más jóvenes, a colaborar con las mafias.
Los habitantes del Campo de Gibraltar defienden la honestidad, convivencia y humanidad de sus vecinos, aunque no obvian que la facilidad del "dinero en la mano" cuando no hay otra salida, es muy difícil de combatir sin medidas económicas y sociales.