Cádiz acoge un encuentro internacional con representantes de una decena de países sobre el futuro de la construcción de barcos.
Nuevos diseños y materiales más ligeros pero resistentes son el futuro.
Cádiz acoge hasta el viernes un encuentro internacional al máximo nivel sobre el presente y el futuro de la industria naval. Representantes de 9 países, aunque la mayoría españoles, debatirán sobre las nuevas tecnologías aplicadas a los procesos de fabricación de buques de última generación.
Los buques de guerra del futuro no se parecerán en nada a los actuales. Porque deberán defenderse de nuevas amenazas, como los misiles de hipervelocidad. Su diseño cambiará, para hacerlos más indetectables; se impondrá la denominada fabricación aditiva: el acero pesado dejará paso a nuevos materiales multicapa más ligeros y que, además, serán resistentes al fuego. Es el camino por el que transita el futuro de la industria naval de defensa.
Pero para ello, hace falta cambiar muchas cosas, desde diseñar las maquinarias apropiadas para fabricar estos barcos, hasta establecer nuevas normas y estándares. En la Bahía de Cádiz, tímidos pasos ya caminan en esta dirección. Como el Centro de Fabricación Avanzada que pronto verá la luz.
Es uno de los muchos asuntos que se están tratando en Cádiz, hasta el viernes, en el encuentro sobre tecnologías duales en industria naval, al que asisten más de 80 empresas españolas y también de otros ocho países: Portugal, Rumanía, Italia, Países Bajos, Bélgica, Reino Unido, Turquía o Grecia.