El fuego afectó a siete de las ocho torres de la urbanización, que se hallaba en un proceso de reforma exterior. Avanzó a gran velocidad alimentado por andamios de bambú recubiertos con mallas plásticas y lonas impermeables.
El incendio declarado en siete edificios de un complejo residencial de Hong Kong deja ya 55 fallecidos, 76 heridos y más de 200 desaparecidos, según las últimas cifras difundidas este jueves por los servicios de emergencia.
El jefe del Ejecutivo hongkonés, John Lee, ha asegurado que los incendios declarados en el complejo residencial Wang Fuk Court "están ya totalmente bajo control", mientras continúan las operaciones de búsqueda y atención a los damnificados por el siniestro.
Lee señaló que las autoridades darán cobijo a 1.800 residentes afectados y que se establecerá un fondo de asistencia de 300 millones de dólares hongkoneses (38 millones de dólares, 33 millones de euros).
El fuego afectó a siete de las ocho torres del complejo residencial, que se hallaba en un proceso de reforma exterior. El fuego avanzó con una velocidad "inusual", según las autoridades, alimentado por andamios de bambú recubiertos con mallas plásticas, lonas impermeables y planchas de poliestireno expansivo empleadas para sellar ventanas y aislar fachadas.
Las autoridades han anunciado la creación de un equipo especial para investigar posibles irregularidades o prácticas corruptas en estas obras de renovación. Y examinarán "exhaustivamente" si los trabajos de mantenimiento pudieron implicar prácticas "corruptas" o decisiones que contribuyeran a la rápida propagación de las llamas.
La policía ha detenido a dos directores y a un consultor de ingeniería de la empresa contratista responsable de las obras, bajo sospecha de homicidio imprudente.