Paula Alonso, víctima de pederastia en la Iglesia: "Es urgente apartar a los abusadores del contacto con menores"

Paula Alonso Pimentel fue víctima de agresiones sexuales por parte de un religioso y actualmente es miembro de la Asociación Infancia Robada, una de las entidades que lucha por la reparación de las víctimas de la pederastia en el seno de la Iglesia. En "Despierta Andalucía" ha compartido su historia a raíz de conocerse la apertura de una investigación por parte del Vaticano sobre el obispo de Cádiz, Rafael Zornoza.

"Cada vez que surge un caso nos remueve a todas las víctimas, nos sentimos identificados, cuesta mucho hablar, tardamos años, primero en aceptar el daño que nos ha hecho y en ser conscientes de que no se puede olvidar aunque lo intentemos"

Paula lamenta la forma en la que, habitualmente, la Iglesia actúa frente a las denuncias de abuso sexual. "Hasta ahora la Iglesia todo lo que ha hecho ha sido apartar a gente que se sabía que eran abusadores sexuales y los llevaban a otros centros o parroquias donde han seguido en contacto con menores". Por eso reclama que "lo primero y más urgente es apartarles de cualquier contacto con menores".

Sobre el religioso que la agredió a ella en el colegio de los Maristas de Valladolid donde estudiaba, Paula Alonso explica que "me enteré muchos años después que murió al año siguiente pero pude saber que lo trasladaron a Segovia".

Para Paula Alonso, la Conferencia Episcopal debería actuar con más contundencia. Más aún tras conocerse el caso del obispo de Cádiz como presunto abusador de una menor, que el Vaticano está investigando. "Esto es un tsunami, la situación se les pone cada vez peor, ya no creo que puedan seguir cerrando la puerta pero intentarlo lo intentan siempre", lamenta. 

Las secuelas para las víctimas de los abusos en la Iglesia son difíciles de reparar. Paula Alonso explica que lleva "12 años en terapia, varias depresiones, he tenido que dejar de trabajar, he vivido en modus superviviencia'.