Pese a la gran caída generalizada en todas las bolsas, Donald Trump asegura que en los mercados habrá un boom por su decisión. Y se muestra dispuesto a negociar los aranceles con los países que tengan algo que ofrecer. Se lo ha dicho a los periodistas que le acompañaban en el Air Force One, en un vuelo a Florida, donde va a participar en un torneo de golf. "Todos los países nos llaman. Esa es la belleza de lo que hacemos. Nos hemos puesto al volante". Los periodistas le preguntaron si está dispuesto a hacer tratos con otros países. “Bueno, depende. Si alguien nos dice que nos va a dar algo fenomenal, siempre y cuando nos den algo que sea bueno. Por ejemplo, con TikTok. Tenemos una situación con TikTok en la que China probablemente dirá que aprobaremos un acuerdo, pero que ustedes hagan algo con los aranceles”, contestó el presidente, que dijo que solo estaba poniendo TikTok como ejemplo, no que esas conversaciones estuviesen teniendo lugar.
“Los aranceles nos dan un gran poder de negociación. Siempre lo han hecho. Los usé muy bien en el primer mandato. Ahora lo estamos llevando a un nivel completamente nuevo” continuó el presidente. El Departamento de Comercio ha tratado de trasladar la idea de que los gravámenes no son negociables, pero la práctica del presidente, con sus aranceles de quita y pon, da idea de que está dispuesto a variar sus posiciones si se apunta un triunfo.
Trump asegura que los mercados y la economía estadounidense van a experimentar un "boom" a raíz de su programa global de "aranceles recíprocos" que presentó el miércoles y que está sacudiendo los parqués de todo el mundo por la posibilidad de que provoque una recesión a gran escala. "Está yendo muy bien", explicó Trump a medios en la Casa Blanca al ser preguntado por los efectos de su paquete arancelario, que hoy dejó caídas generalizadas en las bolsas asiáticas y europeas y que, a falta de una hora para que se cierre la negociación en Nueva York, deparaba pérdidas de entre un 3 % y un 5 % en los tres principales indicadores de Wall Street.
"Ya dije que sería como está siendo", afirmó el presidente estadounidense, que hizo hincapié en que "los mercados van a ver un boom" y EE.UU. "va a prosperar", e insistió una vez más en la idea de que otros países "se han aprovechado" de la primera economía mundial "durante muchos, muchos años".
El miércoles Trump anunció un arancel global del 10 % que se ven superados, en el caso de algunos países, de gravámenes "recíprocos" basados en el superávit que tengan con EE.UU. y la dimensión de sus exportaciones al país norteamericano, una fórmula pensada para medir las barreras contra los productos estadounidenses que ha sido criticada por expertos. Los aranceles presentados en lo que Trump dio en llamar el "día de la liberación" suponen el movimiento más agresivo y arriesgado activado hasta la fecha en el marco de su política comercial, con la que aseguró hoy que el Tesoro estadounidense "recibirá entre seis y siete billones de dólares" en recaudaciones aduaneras, que pagarán los importadores estadounidenses.
Así se manifestaba Trump mientras se vive un viernes negro en las bolsas. El efecto de los aranceles se deja sentir con fuerza. En la Bolsa de Madrid, el Ibex 35 cae más del 3 %. Efecto similar en las bolsas de Londres, Francfort, París o Milán. Los bancos son los más castigados. El Santader cae mas del 6 %. La ola pesimista llega también a Japón, con una bajada del 2,75% en el índice Nikkei.