En solo una semana, estos incendios han arrasado unas 115.000 hectáreas. Los incendios en Castilla y León evolucionan favorablemente. Pero el fuego entre Zamora y Ourense está descontrolado
La circulación ferroviaria entre Madrid y Galicia continúa suspendida. Miles de pasajeros, en plenas vacaciones de verano, están desesperados y buscan alternativas para llegar a su destino.
España se enfrenta estos días a la peor oleada de incendios forestales del siglo. Actualmente permanecen 38 focos activos en Extremadura, Castilla y León, Galicia, Asturias y Valencia. Los más graves se localizan en las provincias de Zamora y Ourense. En solo una semana, estos incendios han arrasado unas 115.000 hectáreas. Y por desgracia, también hay que hablar de daños personales: tres personas fallecidas en la lucha contra el fuego y más de 20 heridos, hasta el momento. Además, más de 5.000 vecinos siguen desalojados en todo el país, como medida preventiva.
Los incendios siguen arrasando el noroeste peninsular. Las temperaturas suben y eso preocupa. Los incendios en Castilla y León, evolucionan favorablemente. Pero el fuego entre Zamora y Ourense está descontrolado. Cuatro personas están detenidas por provocar estos fuegos que asolan España. La circulación ferroviaria entre Madrid y Galicia continúa suspendida por la mala evolución de los incendios. Miles de pasajeros, en plenas vacaciones de verano, están desesperados y se ven obligados a buscar alternativas para llegar a su destino.
En Galicia, Orense suma ya casi 32.000 hectáreas calcinadas y nueve focos activos, el más grave en Chandrexa de Queixa, con más de 11.000. También preocupa Oímbra, donde se han producido evacuaciones. En La Coruña, el fuego de Toques ha quemado 200 hectáreas.
En Castilla y León, los medios aéreos se han reincorporado a los 12 grandes incendios, nueve de nivel 2, la mayoría en León. El de La Uña se agrava y otro ha cruzado desde Orense a Zamora, donde se ha evacuado a 1.500 personas. En León, el de Molezuelas podría quedar perimetrado si el tiempo lo permite.
En Extremadura, el incendio de Pallares, en Badajoz, alcanza 2.500 hectáreas y mantiene a 40 evacuados. Parte del fuego se originó por un accidente de un camión en una zona agrícola y ahora está estabilizado en todo su perímetro. El de Jarilla se mantiene en unas 4.800 hectáreas. Siguen activos los de Alburquerque y Aliseda, con 800 hectáreas afectadas. En Llerena, un incendio obligó en la noche del jueves a evacuar a 40 personas.
En Asturias, la situación mejora: quedan ocho incendios forestales, cuatro activos y cuatro controlados, que siguen en revisión.
FEIJOÓ PIDE LA INTERVENCIÓN DEL EJÉRCITO
Ante la gravedad de la situación, el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha exigido al Gobierno la intervención del Ejército y más medios para acabar con los incendios. Ha sido desde el puesto de mando avanzado de Palacios del Sil en la provincia de León, donde ha acompañado al presidente de la comunidad, Alfonso Fernández Mañueco. En esta zona, en la localidad de Salientes, la Guardia Civil ha evacuado a 300 personas.
El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha insistido en que la Administración Central está poniendo y pondrá "en cualquier circunstancia" todos los medios a disposición de las comunidades autónomas para la lucha contra los incendios, incluidos, si fueran necesarios, los de la Unión Europea. Desde el Gobierno prometen que las ayudas llegarán lo antes posible porque esta emergencia terminaá cuando los afectados puedan reiniciar su vida.
La ola de incendios que ha calcinado ya más de 115.000 hectáreas y ha acabado con la vida de tres personas. La Unidad Militar de Emergencias (UME) tiene a 1.300 militares en ataque directo contra doce incendios repartidos por toda España y a otros 2.100 en misiones de apoyo, que están utilizando un total de 440 medios. Estamos viviendo uno de los peores veranos que se recuerdan en lo que a incendios se refiere.
En España los fallecidos ascienden a tres: el último es otro voluntario de Castilla y León, un hombre de 37 años, Jaime Aparicio, ha muerto por las quemaduras que sufrió en Nogarejas (León) intentando sofocar el incendio que comenzó en Molezuelas de la Carballeda (Zamora), que también acabó con la vida de Abel Ramos, de 35 años, a quien acompañaba. Sólo este incendio habría arrasado más de 31.000 hectáreas, según el Gobierno regional.
La Guardia Civil ha hecho un llamamiento pidiendo "responsabilidad" a los vecinos de las zonas afectadas, pidiendo que no traten de sofocar las llamas con sus medios. El jueves ha dejado también otros dos detenidos bajo sospecha de provocar fuegos, uno en Zamora que almacenaba residuos de forma ilegal y un agricultor de Orense que habría iniciado el fuego que arrasó 5.000 hectáreas y causó heridas a 3 brigadistas. La mayoría de los incendios son provocados, de momento hay 88 investigaciones abiertas y una decena de detenidos. Se ha detenido también al presunto responsable del incendio de Puercas, el más devastador de los declarados este verano, con casi 13.000 hectáreas quemadas.
La situación es de tal gravedad, que la Guardia Civil ha empezado a multar a quienes no obedecen las órdenes de evacuación, que no solo ponen en peligro a los operativos de salvamento sino que detraen recursos necesarios en otras labores. En Cabezabellosa hubo que llamar a la puerta de este extremeño que se negaba a marcharse.