LA VOZ DE VIGORRA
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Escapada Real y vírica

Jesús Vigorra da su particular punto de vista sobre los temas de actualidad en La mañana de Andalucía.

JESUS VIGORRA 1 junio 2020

Cuando va remitiendo la pandemia en nuestro país (solo dos fallecidos este fin de semana) en Córdoba se ha revelado que en una fiesta de alto postín se reunieron más de veinte personas con asistencia del príncipe belga, Joaquín de nombre, hijo de Astrid de Bélgica y sobrino del rey Felipe II, que luego del sarao dio positivo en coronavirus. Al parecer el joven príncipe mantiene relaciones con una joven cordobesa con la que asistió a las dos fiestas que se celebraron los pasados días 25 y 26. Y poco más se sabe, pues aunque han pasado varios días, ni siquiera ha trascendido el lugar donde tuvieron lugar esas reuniones que pasaban de las 15 personas permitidas en la fase 2. También se sabe que asistieron cinco personas de Sevilla que no podían hacer ese viaje interprovincial entre las dos capitales andaluzas.

El príncipe que trajo el virus ha cometido, o le permitieron cometer, dos errores graves: el primero, que no permaneció los 14 días en cuarentena, norma establecida por decreto para todos los extranjeros que viajan a España durante el estado de alarma; y el segundo, asistir a una fiesta donde se congregaron más de 15 personas, algo que no está permitido en la fase 2. Por ambos motivos, el propio presidente de la Junta de Andalucía manifestó ayer su descontento y desaprobación.

Ahora bien, ¿nos enteraremos cómo pudo viajar el príncipe belga saltándose el protocolo establecido de obligado cumplimiento en nuestro país? ¿Sabremos realmente dónde fue la fiesta o las reuniones y cuántas personas acudieron? ¿Conoceremos los nombres de las personas que fueron de Sevilla a Córdoba? Hoy se cumple una semana de la llegada a Córdoba del joven de sangre azul, pero hasta el momento muy poco sabemos. En cambio, hemos sabido de díscolos ciudadanos con el confinamiento del que nos han dado todo tipo de detalles para escarnio de los indisciplinados. En concreto, y por no salir de Córdoba, unos hermanos con cierta simplicidad que salieron en bicicleta cuando no se debía y acabaron en el cuartelillo de Pozoblanco donde pasaron la noche y los soltaron al día siguiente para que se fueran andando a su pueblo. Aún raro es el día que no los sacan en algunas cadenas de televisión haciendo mofa de ellos, incluso con algunas imágenes que son de otro tiempo.

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