El atentado contra Hamás en Líbano amenaza con extender el conflicto
De confirmarse la autoría de Israel sería su mayor logro militar desde que emprendió la ofensiva contra el grupo islamista palestino.
Las autoridades de Gaza cifran ya en 22.313 los muertos pero advierten que sigue habiendo 7.000 desaparecidos bajo los escombros de edificios destruidos.
Tras el ataque, Egipto congela su papel de mediador en el conflicto.
En las últimas horas crece la preocupación internacional por la posibilidad de que la guerra de Gaza se extienda en la región, tras el asesinato este martes del alto cargo de Hamás, Saleh Al Aruri, en un ataque con dron en la capital de Líbano.
Israel ni confirma ni desmiente el atentado, que podría arrastrar a otros grupos islamistas a un conflicto regional, pero se trataría de su mayor logro militar desde el 7 de octubre en su empeño de acabar con la estructura de Hamás.
A media tarde del martes, una explosión hizo volar por los aires el tercer piso de un edifico en las afueras de Beirut. En su interior el número dos de Hamás mantenía una reunión con otros líderes de la organización palestina. Los testigos cuenta que un dron acertó de pleno acabando con la vida de Saleh Al Aruri, el veterano lider islamista en el exilio al que Israel tenía en su punto de mira desde hace años.
Tras el atentado se precipitaron las promesas de venganza, tanto en las calles de Cisjordania como en las proclamas de Hezbolá, el grupo chíí proiraní.
El Gobierno de Líbano ha lanzado una llamada a la calma. Se trata de la primera vez en 20 años que Israel ataca en Líbano, aunque por ahora ni confirme ni desmienta esta acción que ya ha tenido consecuencias.
De momento Egipto ha congelado su papel mediador y se aleja cualquier acercamiento para un posible alto el fuego.
En Gaza este miércoles siguen los ataques contra la población civil. Al menos 128 palestinos han muerto y 261 han resultado heridas por ataques en las últimas 24 horas, informó el Ministerio de Sanidad de la Franja, bajo control de Hamás, en el 89 día de guerra entre el Ejército israelí y el grupo islamista.
Desde que comenzó la ofensiva el pasado 7 de octubre, el último balance en Gaza señala que son ya 22.313 muertos y 57.296 heridos.
Las autoridades palestinas estiman que la cifra de muertos podría ser mucho más alta, ya que hay unos 7.000 desaparecidos que se cree que están bajo escombros de edificios destruidos.
