Aparte de los premiados, la gala de clausura de anoche tuvo un protagonista muy especial. Es Guillermo Torres Morales, un joven periodista malagueño. Nació con parálisis cerebral, ama el cine y lleva cubriendo el festival en su silla de ruedas desde hace seis años. Para él, fue un sueño cumplido: subió al escenario para entregar la Biznaga del Público.
Guillermo Torres vive con pasión el festival de cine. Asiste a las ruedas de prensa, entrevista a los artistas y comenta sus impresiones en su canal de YouTube, un blog personal y los medios de la diócesis.
Tiene a su lado a Adrián Campos, músico y compañero de universidad. Juntos están acostumbrados a superar obstáculos. En su diccionario, no existe la palabra imposible. Anoche, en el Teatro Cervantes, él, que tiene un master de guion y quiere hacer cine, también fue una estrella.