Por cuarta vez en la Feria y segunda en su carrera. El toledano Tomás Rufo cortó tres orejas y salió a hombros por ella igual que lo hiciera el pasado año en su debut.
La maestranza de Sevilla volvió a abrir su Puerta del Príncipe de La Maestranza por cuarta vez en lo que va de Feria de Abril.El toledano Tomás Rufo cortó tres orejas y salió a hombros por ella igual que lo hiciera el pasado año en su debut. Manzanares y Pablo Aguado se fueron de vacio.
Ya no es causalidad. Tomas Rufo ha entrado en Sevilla por la Puerta Grande y salido dos veces por la del Príncipe. En la corrida de ayer el diestro se encontró con un toro de una calidad suprema que humilló mucho del hierro de Jandilla. Rufo torea clásico, despacio y con mucho temple, y así hilvanó una faena basada en la profundidad de los muletazos. La estocada le valió las dos orejas y ya solo faltaba cortar una para salir por la Puerta deseada. Incomprensiblemente no se le dio la vuelta al toro en el arrastre. El sexto tuvo muy poco poder pero Rufo supo dosificarlo y en corto ligarle los pases en interminables naturales. Otra vez mató bien y llegó la oreja y el triunfo.
Manzanares lidió un primer toro con buenas cosas pero no fácil y no llegó el acople. Su segundo fue un gran toro, con calidad y son pero perdía las manos continuamente y deslucía la faena. Pablo Aguado pasaportó pronto al sobrero que lidió en primer lugar porque se defendió. Todo apuntaba a gran triunfo de Aguado. Toreó a gusto al cuarto pero el toro duró un suspiro y todo acabó.