Declaran en el juicio con jurado popular la madre y su expareja acusados del asesinato del bebé de 18 meses, hijo de ella
La madre asegura que ella no se dio cuenta de nada
El escrito de la Fiscalía recogía que tuvo que oir todos los golpes inevitablemnte
Los acusados están en prisión desde hace tres años en abril de 2016 cuando murió el bebé de 18 meses en la capital hispalense. Hoy eran ellos quienes declaraban.
La primera en hacerlo ha sido la madre, que se ha derrumbado varias veces. Ha señalado que aquella noche fue su pareja el que acostó al bebé y que ella en todo momento pensó que le crío estaba dormido hasta que descubrió que había muerto.
"Ojalá me hubiese dado cuanta de algo aquella noche" ha repetido la mujer.
El fiscal pide para cada uno 28 años y medio de cárcel por asesinato y maltrato en el ámbito familiar. También la retirada de la patria potestad a la madre durante siete años del otro hijo,en el caso de la madre de los pequeños, el Ministerio Público solicita además la inhabilitación especial para el ejercicio de la patria potestad por un periodo total de seis años y nueve meses, con respecto al otro hijo que está bajo la tutela de la Junta.
Los hechos
En su exposición de los hechos, el Ministerio Fiscal relata que, durante 2015, la acusada, identificada como I.M.R.M., vivió con sus dos hijos a quienes "de forma constante", les sometió a "todo tipo de insultos a gritos y castigos físicos, zarandeándolos hasta tirarlos al suelo o dejándolos a oscuras en el pasillo del bloque o en su habitación".
La Fiscalía añade que esta situación continuó cuando la acusada y sus dos hijos se trasladaron a una vivienda de la barriada de Los Prunos, en la zona hispalense de Su Eminencia, para convivir con el investigado, E.T.R., con quien I.M.R.M. comenzó una relación sentimental a principios de 2016 y que tenía dos hijos fruto de otra relación anterior que le visitaban los martes y jueves de cada semana y los fines de semana alternos, conviviendo todos juntos en el domicilio en ese periodo.
De esta manera, el Ministerio Público precisa que, hasta el mes de abril de 2016, los acusados trataban a los dos hijos de la mujer "con absoluto desprecio, insultándoles constantemente con expresiones como 'imbéciles' y agrediéndoles, a modo de castigo físico, por el simple hecho de que protestaran o lloraran por cualquier cosa, siendo también frecuente que los acostaran sin cenar, llegando incluso a pegarles en presencia de los hijos" del investigado.
Así, y según el escrito del fiscal, los castigos físicos al hermano de la víctima, de tres años entonces, consistían en "apagarle cigarrillos en la espalda, barriga o glúteos, meterle en la bañera y ducharle con agua fría durante largo rato mientras lloraba, encerrarle en su habitación cerrada con pestillo y sin luz" y "si seguía llorando, iban al cuarto y le pegaban" e incluso "le golpeaban en la boca, haciéndole sangrar en alguna ocasión".
Además, el Ministerio Público precisa que los hechos tuvieron lugar sobre las 19,00 horas del 23 de abril de 2016, cuando los acusados decidieron acostar al bebé, de forma que el investigado se llevó al niño a la habitación de ellos, donde tenía la cuna, todo ello "con la aprobación" de su pareja, que permaneció hablando por teléfono en la habitación de al lado.
"Como quiera que el niño no paraba de llorar", el acusado "agarró fuertemente por los brazos" al menor, "que no tenía capacidad alguna de defensa dada su corta edad", y "con ánimo de causarle la muerte o, en todo caso, sin importarle que se muriera, lo zarandeó brutalmente, al tiempo que le chocaba sucesivamente la cabeza hasta en tres ocasiones con una superficie plana, dejándole después en la cuna".
La Fiscalía agrega que, dada la cercanía de las habitaciones, la madre del bebé, "que estaba a unos seis metros, escuchó los golpes y el llanto desconsolado del niño, obviando la obligación de cuidado que como madre le correspondía, no haciendo nada para impedir la agresión mortal ni posteriormente para auxiliar a su hijo, desentendiéndose de su estado y sin importarle que, a causa de los golpes que había escuchado, su hijo falleciera".
Así, tal y como indica el Ministerio Público en su escrito de acusación, la muerte del bebé "no fue instantánea, sino que se produjo de forma progresiva en unas horas".