El Ayuntamiento de Sevilla reconoce que la feria llegó a colapsarse por la gran afluencia de público -se calcula que un millón de asistentes, según el alcalde- debido al Puente de mayo y a las ganas de celebración, tras dos años de parón por la pandemia.
Domingo apoteósico en el Real de la Feria de Abril de Sevilla. Un río de gente por cada calle, colas en los cacharritos que recordaban a las de la Expo 30 años después y mucha liberación, hasta el punto de que para ver a más de uno con mascarilla te tenías que topar con un grupo de orientales haciendo turismo. Pero es que este lunes es festivo, el tiempo acompaña y todo apunta a que se repetirá la historia.
El Ayuntamiento de Sevilla reconoce que la feria llegó a colapsarse por la gran afluencia de público -se calcula que un millón de asistentes- debido al Puente de mayo y a las ganas de celebración, tras dos años de parón por la pandemia.
Un comienzo de la feria con cifras récord. Se ha incrementado en un 10% los usuarios en el transporte público y ha aumentado también la ocupación de aparcamientos y en el número de carruajes por el Real.
Fuentes municipales aseguran que están funcionando los controles para acabar con la botellona y la venta ilegal de alcohol en la calle del Infierno.
No obstante, la ausencia de incidencias graves es la tónica en estos primeros días de feria que ha dejado unas 200 asistencias sanitarias leves.