Miguel Ángel Benítez, de 62 años, natural de Bonares y residente en Sevilla, se contagió durante una convención de banca en Málaga, donde se sentó junto a un compañero que en sus vacaciones tuvo contacto con un contagiado de Asia
Fue el 26 de febrero de 2020. Desde entonces han muerto cerca de 13.000 andaluces y se han registrado 1.300.000 contagios.
Este sábado, el número de hospitalizados marca el dato más bajo desde la pasada Nochebuena y el de ingresos en UCI, el más bajo desde el 20 de diciembre
Este sábado se cumplen dos años del primer caso de covid 19 en Andalucía. Miguel Ángel Benítez, de 62 años, natural de Bonares y residente en Sevilla, se contagió durante una convención de banca en Málaga, donde se sentó junto a un compañero que en sus vacaciones había viajado a Canarias y tuvo contacto con personas Asiáticas. En ese momento, con él eran diez los casos detectados de coronavirus en España. Desde entonces han muerto cerca de 13.000 andaluces y se han registrado 1.300.000 contagios. En declaraciones a Canal Sur Televisión, recuerda lo que sintió: "Me quedé helado. Por fortuna no contagié a ningún familiar aunque sí a algún sanitario".
El paciente cero reconoce que pasó miedo y que hasta que meses después de salir del hospital le dijeron que estaba de anticuerpos "hasta arriba" no se vio totalmente curado. Miguel Ángel Benítez, el paciente cero de covid confiesa en otra entrevista con EFE que nunca pensó que la pandemia matara a tanta gente.
Hace dos años, el 26 de febrero de 2020, la Consejería de Salud y Familias confirmó el primer caso de coronavirus detectado en Andalucía en un paciente ingresado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Se trataba del primer infectado por transmisión comunitaria en España, el primer contagiado no procedente de los lugares donde la enfermedad empezaba a crecer.
Benítez, que entonces tenía 62 años, evoca en una entrevista cómo fueron esos momentos iniciales. "Al principio lo pasé tan mal que temía una recaída", dice el hoy empleado de banca jubilado, quien recuerda con cierto resquemor la estupefacción que sintió cuando le confirmaron que estaba infectado por coronavirus.
Tras estar tres días con una fiebre muy alta el médico le dijo que veían una "cosa muy fea" en los pulmones y todo apuntaba a una neumonía. Ingresó en el hospital, tras dos noches en observación donde lo pasó "muy mal", lleno de dudas y de preguntas sobre qué le podría estar ocurriendo.
Una vez que subió a planta se tranquilizó porque al menos estuvo "cómodo" y, aunque seguía sin saber lo que tenía, el hecho de que estuviera aislado le hacía sospechar que algo ocurría. Y un día se convirtió en el paciente cero, cuando la pandemia no era aún pandemia y cuando las muestras se llevaban al Hospital Carlos III de Madrid.
"Cuando di positivo me quedé helado", señala Miguel Ángel, quien a partir de entonces empezó a pensar cómo se había contagiado. Recuerda con cierto enfado que desde la Consejería de Salud se dijera que pudo haberlo hecho tras una juerga flamenca en Málaga en la que participaron ciudadanos chinos.