Un grupo de hortelanos ha recuperado un sistema de regadío construido en la Al Ándalus del siglo IX. Está en Pegalajar, en Jaén. La vuelta del agua a la fuente y a la charca del centro del pueblo ha permitido recuperar una parte esencial de su historia. Los bancales construidos sobre roca entre los siglos IX y X en Pegalajar, y las canalizaciones excavadas en piedra o subterráneas, tenían un fin: aprovechar al máximo el agua. La Asociación Fuente de la Reja pretende lo mismo.
Ocurrió en la huerta de Pegalajar cuando se secó la fuente y la charca en 1988 por la sobreexplotación de acuíferos. El olivar ganó terreno en los bancales. Pero el agua ha vuelto y estos hortelanos voluntarios quieren frenar el monocultivo olivarero, y aprovechar la histórica infraestructura. Han comprado 4.000 metros de terreno para predicar con el ejemplo en su propia huerta. El agua de la Fuente la Reja ha revitalizado la huerta y la charca del centro del pueblo, su principal atractivo; hasta celebran un triatlón que va por su tercera edición.