La crisis energética afecta a la industria del ladrillo y la cerámica
Aseguran que el precio de la energía suponía el 30 o 40 por ciento del precio de este producto antes de esta crisis energética. Ahora es más del 80 y la incertidumbre continúa.
La situación que padece la industria de la cerámica es insostenible. Sus representantes dibujan un escenario muy contradictorio. Aseguran que todavía hay una elevada demanda, pero que el constante incremento del precio de la energía los está ahogando.
La desconvocatoria de la huelga del transporte ha dado cierto respiro a esta fábrica de ladrillo de Bailén, en Jaén. Pero ese alivio es momentáneo.
El problema más grave está dentro, en sus costes de producción. Aseguran que el precio de la energía suponía el 30 o 40 por ciento del precio de este producto antes de esta crisis energética. Ahora es más del 80 y la incertidumbre continúa.
Tratan de recomponerse, buscar fuentes propias de abastecimiento, como la solar y la biomasa, pero no llegan. La situación es crítica, porque hay demanda y, aunque tratan de repercutir la subida en el cliente, la situación se les hace insostenible.
Afirman que buena parte de la industria ha decidido parar ante esa incertidumbre que les lleva a fijar precios por debajo del coste de producción.
Aseguran que este nivel de inflación es insoportable para la economía y piden que se acabe con el pool energético que impone el precio de la energía más cara.
