Los vecinos piden que se traiga arena y se hagan espigones después de que las corrientes hayan reducido la playa a su mínima expresión en los estertores del verano.
El verano da sus últimos coletazos y los vecinos de la playa de El Portil, en Huelva, vuelven a la carga con sus reivindicaciones sobre la playa, que cada día tiene menos longitud y más dificultad para llegar a ella. Piden que se restituya la arena que se ha llevado la corriente.
En los últimos años, y a causa de las corrientes desde el Atlántico, el agua ha ido desplazando la arena hasta lugares como la Flecha de El Rompido y otras extensiones de tierra dentro del mar, lo que ha provocado el avance de la marea y el acortamiento de la playa. Los temporales no han hecho más que agravar el asunto. El resultado: una playa, la del Portil, que cada vez es más pequeña e inaccesible.
El Ayuntamiento ha instalado unas pasarelas de madera para facilitar el acceso a la playa pero muchas de ellas, por la naturaleza inestable del terreno, se caen constantemente.
Los vecinos piden a la Dirección General de Costas que atienda su reivindicación, que vuelva a echar arena donde ahora falta y construya espigones para fijarla al terreno. Ahora la playa, apenas se parece a la original.