El asesinato en Granada del Fiscal Jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Se quiere investigar quién fue el jefe de ETA que dio la orden.
En el auto de reapertura se rechaza imputar a nadie de momento, pero sí ordena practicar diligencias para averiguar más datos sobre cómo tuvo lugar el asesinato y quién ordenó en última instancia a los dos terroristas que ejecutaran el atentado.
La familia de Luis Portero sostiene que hubo otros dos inductores, que son los que señalaron el objetivo de asesinar a Luis Portero, decisión previa a la preparación del atentado. Fueron Txapote, dirigente de la cúpula etarra y la responsable de los comandos de la banda, Ainhoa Múgica Goñi, Olga, quienes determinaron que Luis Portero era el objetivo a matar.
En un escrito, la viuda de Portero se refiere a un documento de ETA incautado en el año 2000, la agenda de Txapote, donde se decía que Luis Portero había sido seleccionado como objetivo prioritario porque podría haber sido elegido sucesor del fiscal general del Estado entonces, Jesús Cardenal.
Según la Policía, aunque Txapote no aparece mencionado, era el máximo responsable y autoridad por encima del condenado como inductor. No parece probable que el subordinado tomara esa decisión sin el visto bueno del jefe militar de la banda.
La Audiencia Nacional condenó en 2002 a los etarras Harriet Iragui Gurruchaga y Jon Igor Solana Matarran por esta última acción a 54 años de prisión.
En 2007, el mismo tribunal condenó a Juan Antonio Olarra Guridi por inducir a la comisión del crimen a 30 años de cárcel. Según esta última sentencia, Olarra Guridi era el máximo responsable del comando Andalucía en el año 2000 y como tal "manejaba" a los dos primeros, a los que ordenó trasladarse desde Francia hasta Andalucía para llevar a cabo una campaña de atentados. En concreto, les facilitó fotografías, horarios, direcciones y otros datos que sirvieron para que los etarras dispararan dos tiros que acabaron con la vida de Luis Portero, entonces fiscal jefe del alto tribunal andaluz.