Andalucía cuenta con 27 unidades clínicas para este tipo de dolencias y casi medio millón de personas reciben tratamiento.
El año pasado 815 personas se quitaron la vida en nuestra comunidad.
Los problemas de salud mental suelen ser todavía hoy dolencias invisibilizadas. Este viernes 10 de octubre se conmemora, precisamente, el Día Mundial de la Salud Mental bajo el lema "Compartimos vulnerabilidad".
Cuando una enfermedad mental se mezcla con adicciones como el alcohol se multiplican las conductas suicidas. Es una de las alertas y luces rojas que enciende este Día Mundial de la Salud Mental en nuestra comunidad.
En Andalucía 815 personas se quitaron la vida el año pasado. Por provincias, en cifras absolutas, Sevilla encabezó el ránking de suicidios en 2024, seguida de Málaga y Granada.
Desórdenes alimentarios, depresión, esquizofrenia, ciberacoso... son otros trastornos que llegan a las consultas. En Andalucía hay 27 unidades de gestión clínica de salud mental y casi medio millón de personas recibe tratamiento en ellas.
Infraestructuras y equipamientos a los que la Junta destinó 18,5 millones el años pasado, más 7,1 millones para nuevas actuaciones en salud mental y otros 3,06 millones de euros específicos para el Plan de Prevención del Suicidio.
Si durante años fue un tema tabú, ahora la salud mental pretende ser un eje de las políticas sanitarias. Visibilizarla y normalizarla implica a toda la sociedad y especialmente a quienes trabajan con niños, adolescentes, jóvenes, personas mayores y los colectivos más vulnerables.
Familias y sanitarios exigen que se protejan los derechos de los enfermos de salud mental. Y hoy especialmente nos recuerdan que las danas, las tragedias colectivas, matan, pero también lo hace su impacto psicológico y más cuando se enfrentan a ellas personas que se sienten solas o desprotegidas.