Calculan que casi el 20% de los trabajadores ha sido víctima de algún ataque verbal o físico.
En los últimos tres meses se han registrado en la provincia de Córdoba 15 agresiones a trabajadores de la sanidad. Se calcula que casi el 20% del personal sanitario de la provincia ha sufrido alguna agresión. Son datos que aportan los representantes sindicales, que alertan de que el problema va en aumento.
El caso más reciente se ha producido en el Hospital Valle del Guadiato, en Peñarroya-Pueblonuevo. Fue una agresión múltiple por parte de una usuaria a una médico, una enfermera y un enfermero el pasado 27 de septiembre.
Córdoba es la tercera provincia andaluza con mayor tasa de agresiones al personal sanitario. Sus representantes vuelven a pedir más medidas para prevenirlas, a pesar de que cuentan con un observatorio de reciente creación para abordar el problema.
La mayoría de las agresiones son de tipo verbal, aunque en uno de cada cuatro casos también se registran agresiones físicas. Los centros de atención primaria son el escenario y las mujeres médicos las víctimas principales. El perfil del agresor es un hombre de mediana edad, según explica el presidente del Sindicato Médico Andaluz (SMA) en Córdoba, Francisco García, que pide más medidas de prevención porque -asegura- hay incluso más agresiones de las que salen a la luz. El SMA reclama también que la administración interponga las denuncias de oficio.
Los representantes del personal sanitario de CCOO y UGT en Córdoba, Francisco José Damas y María Eugenia Urbano recuerdan también a la administración que detrás de este aumento de las agresiones se esconde la falta de personal y las listas de espera. Dos problemas que, si se atajan, señalan los sindicatos, se lograría una disminución considerable de las agresiones.