El rastreador vuelve a ser clave ante la relajación de las restricciones
Destaca los brotes en jóvenes y nota relajación y desinformación
Lo hemos comprobado en Córdoba donde estos "detectives" afrontan su segundo verano sin descanso
Estamos en Córdoba, en una de las salas reservadas a los rastreadores. Se turnan equipos reducidos, todos los días. Y rastrean a una población superior a 400.000 personas.
Llaman tras registrarse un positivo. La misma labor de un año pero el perfil es otro. Notan la irrupción de brotes en jóvenes. Crecen las llamadas que hacen a este colectivo y a sus contactos directos, como familiares o amigos. Suelen recibir buena respuesta, pero notan relajación y desinformación.
Algunas personas no entienden que pueden contagiarse vacunadas o que debe extremar el cuidado aunque la tenga puesta. Nos lo cuenta Pilar Conde, enfermera de Vigilancia Epidemiológica.
Con la vacunación, baja la edad del paciente y caen casos graves pero los contagios siguen y ahora crecen. Son casi detectives, indagando el rastro de la persona contagiada y aconsejando sobre pautas en el aislamiento.
Los rastreadores lo forman, por ejemplo, personal de enfermería. 953 con dedicación exclusiva y unos 9.000 de forma parcial. En formación continuada. Un trabajo fundamental, complejo. Y con un verano, el segundo ya, sin descanso.
SE ANUNCIAN CRIBADOS MASIVOS EN 26 LOCALIDADES ANDALUZAS
Y para avanzar contra el virus se siguen haciendo cribados masivos. En los próximos días están previstos en 26 municipios, de las ocho provincias andaluzas.
Granada es dónde se van a realizar más pruebas, en siete pueblos. En Almería tan sólo en Cantoria. Cribados que son voluntarios. Quienes acepten recibirán la citación en el lugar exacto dónde deben acudir y los pasos a seguir.
