La ONG atiende a los colectivos con menos recursos ante el calor extremo de estos días.
También hace seguimiento telefónico a más de 2.500 mayores de la provincia para prevenir los efectos de las altas temperaturas.
Cruz Roja de Córdoba está respondiendo ante las jornadas de calor extremo que se está viviendo en la provincia. Sus voluntarios están entregando 300 ventiladores a familias vulnerables. Una nueva iniciativa de la entidad, que además hace seguimiento telefónico a más de 2.500 mayores de la provincia para prevenir los efectos de las altas temperaturas.
Las personas mayores que viven solas son uno de los colectivos en los que la ONG pone el foco cuando suben tanto los termómetros. Sus voluntarios les dan consejos y se interesan por su estado. Pero ahora han decidido reforzar la atención, repartiendo ventiladores de bajo consumo, como explica Carmen Torrico, responsable de Juventud y Medio Ambiente de Cruz Roja Córdoba.
Es un plan de acción que se suma a la ayuda que tres veces por semana ofrece la unidad de emergencia social a las personas sin hogar, los que más sufren los efectos del calor en esta época.
Estas líneas de ayuda existen gracias al voluntariado, un recurso clave en la ayuda a colectivos vulnerables, los que más expuestos están a los efectos nocivos del calor.