No hay carpa, porque no hay público, taquillas cerradas desde finales de octubre. En el Circus Las Vegas la segunda ola les pilló en San Fernando, y aquí siguen, en la tercera, sin poder actuar.
Pero se ha corrido la voz y una ola de solidaridad espontánea les está llegando a su campamento. Comida, algo de dinero, para sobrevivir.
Los vecinos de la localidad gaditana de San Fernando se han volcado con las familias del "Circo Las Vegas". Llevan desde la segunda ola de la pandemia acampados, sin poder actuar y claro, sin ingresos. Un situación muy difícil, que se ve aliviada gracias a la solidaridad.
No hay carpa, porque no hay público, taquillas cerradas desde finales de octubre. En el Circus Las Vegas la segunda ola les pilló en San Fernando, y aquí siguen, en la tercera, sin poder actuar.
Pero se ha corrido la voz y una ola de solidaridad espontánea les está llegando a su campamento. Comida, algo de dinero, para sobrevivir.
La cultura, se lamenta Tony, es la olvidada de esta pandemia, con lo necesaria que es, dice. El rayo de esperanza, este niño, Max, el malabarista más joven de Europa. Diez años de pura ilusión por su futuro y el del circo.