Algeciras intenta recuperar la normalidad
La Plaza Alta, donde el jueves, Yasine Kanza mató a Diego Valencia, ha sido este sábado centro de reunión de los algecireños.
Muchos de ellos han ido a recordar al sacristán.
En la Iglesia de la Palma, donde ejercía como sacristán Diego Valencia se ha celebrado este sábado la primera de las 30 misas que se van a celebrar por su alma. Han acudido menos fieles que de costumbre, aún conmocionados por lo ocurrido.
Fuera, la Plaza Alta ofrece de nuevo una imagen normalidad con personas paseando, tomando sol y niños jugando. Solo flores y velas recuerdan lo ocurrido. De hecho, durante la mañana, varias personas han seguido acudiendo al lugar para recordar a Diego.
Lo ocurrido ha abierto una reflexión en el seno de la parroquia, que se debaten entre qué hacer para evitar actos similares pero manteniendo el carácter abierto y acogedor que tienen los temples. De esta forma, han comunicado a los voluntarios que, a partir de ahora, deben llamar a la policía a la más mínima incidencia que se produzca. Diego Valencia intentó echar a Yasine Kanza del tempo sin pensar en la peligrosidad del individuo y como ya había hecho antes con otras personas.
