Así se deduce del informe Copernicus de la Unión Europea, que certifica que este verano ha sido el más cálido a nivel global desde que hay registros.
2024 va camino de convertirse en el año más caluroso de la historia. Así se deduce del informe Copernicus de la Unión Europea, que ya certifica que este verano ha sido el más cálido a nivel global desde que hay registros.
Con su sistema de satélites, la Unión Europea observa desde el espacio todo lo que pasa en el planeta Tierra y esto es lo que ha visto en los meses de julio y agosto: miles de hectáreas consumidas por las llamas en España, Grecia o Turquía; o prolongadas olas de sequía en países como México con el resultado de muerte y devastación.
Son apenas unos ejemplos de la multitud de datos que el programa Copernicus recopila a escala global para chequear la salud del planeta.
Su último confirma que este verano ha sido el más caluroso desde que hay registros. Se llevan la palma los meses de junio y agosto, mientras que julio registró los dos días más calurosos del año.
Los expertos advierten de que el contexto climático es preocupante y que tal y como vamos es probable que 2024 marque un nuevo récord y acabe siendo el año más cálido desde que hay registros.
También auguran que los fenómenos extremos serán más frecuentes y más intensos si no se toman medidas.