El trabajo de los mulos, imprescindible en la montaña

Nos trasladamos hasta la localidad gaditana de Alcalá de los Gazules para vivir una experiencia extraordinaria, la de hacer un viaje en el tiempo. Conocemos el bonito, pero duro, trabajo del arriero que, con sus mulos, llega a donde aún hoy los vehículos no pueden hacerlo.

Juan Manuel Tizón ‘El Luizo’ es uno de los últimos arrieros que quedan en nuestra tierra. Es una profesión que ha heredado de su familia y que ya tiene garantizada la continuidad, pues su hijo también se dedica a esta profesión ancestral. Ambos, junto a sus mulos, son capaces de atravesar montes y llegar a los rincones más recónditos.

La familia Tizón tiene alrededor de 14 ejemplares con los cuales trabajan diariamente en la arriería. Con ellos vamos a subir a lo más alto del Parque Nacional del Estrecho a recoger unos postes de electricidad.

Vemos cómo es un trabajo en el que estos animales toman un papel protagonista.