Proyecto para salvar al vencejo y garantizar la reproducción de esta especie

Entre los meses de mayo y septiembre es habitual que muchos ciudadanos, como la joven estudiante jerezana, Ángeles, entreguen en los Centros de Recuperación de Especies Amenazadas, los pollos de vencejos que encuentran en el suelo tras caerse del nido, a causa del calor, la curiosidad o al iniciar un vuelo prematuro.

En el CREA Dunas de San Antón, situado en El Puerto de Santa María, Cádiz, una vez registrados, los vencejos son examinados para determinar su estado de salud.

Para ayudar a que estas aves puedan seguir volando en el cielo de nuestras ciudades, la red de CREAs andaluces ha diseño el Proyecto de Voluntariado Vencejos que este año cuenta con la colaboración de la Sociedad Gaditana de Historia Natural.

La experiencia está siendo muy positiva. Enseñan a Juan Carlos, uno de los voluntarios, a alimentar a los pollitos recién llegados.

Para favorecer su cría, la Sociedad Gaditana de Historia Natural también impulsa la instalación de cajas nido en el casco histórico de las ciudades. Un ejemplo lo encontramos en el Instituto de Educación Secundaria Santa Isabel de Hungría de Jerez de la Frontera donde han colocado dos cajas.

Durante nuestra visita los técnicos del CREA atienden a varios cárabos caídos del nido, un águila culebrera desnutrida y un cernícalo impregnado en aceite.

Esta semana se ha celebrado por primera vez el Día Mundial del Vencejo, un ave protegida, cuya población se ha reducido drásticamente en los últimos años. Excepto cuando nidifican, los vencejos pasan prácticamente toda su vida volando, recorriendo miles de kilómetros en busca de un clima mejor.

Este reconocimiento se une al de Ave del Año que le ha otorgado la Sociedad Ornitológica Española para llamar la atención sobre la situación que atraviesa esta especie tan urbanita cuya principal amenazada es la destrucción de sus lugares de cría