Es una limitación, no una enfermedad. Afecta al 10 por ciento de la población y en el Día Europeo de la Dislexia, celebrado esta semana, se busca visibilizar para normalizar.
La dislexia es la dificultad para aprender a escribir y leer. Es una forma sencilla de definir una limitación, no una enfermedad, que busca la normalidad en nuestra sociedad. Y es que igual que hay zurdos, celíacos o intolerantes a la lactosa, también hay disléxicos y con esta misma normalidad deberían tratarse.
El 4 de octubre se celebra el Día Europeo de la Dislexia y esta festividad debería servir para que todos entendamos que los afectados, un 10 por ciento de la población, solo necesitan un poco de más paciencia y comprensión, pero con tranquilidad y algo más de esfuerzo, el aprendizaje se puede hacer con normalidad.
Lo ideal es visibilizar las dificultades y detectar la dislexia a edad temprana para que la persona afectada no caiga en la incomprensión de su entorno.