Noche de emociones con Shaila Dúrcal, Falete y Paco Candela

Shaila Dúrcal es la invitada del programa "Gente Maravillosa". La cantante es la protagonista de una emotiva cámara oculta en la que demuestra que es una persona maravillosa. En esta cámara, en la que se aborda el problema de los trastornos alimentarios, Shaila acude a una peluquería donde es testigo de la conversación entre dos jóvenes amigas. Una de ellas le recomienda a la otra que tome pastillas para adelgazar, una escena ante la que la cantante no tarda en reaccionar ofreciendo los mejores consejos a las jóvenes. Durante la grabación Shaila, que confiesa que "vivió su propia batalla con el peso", no puede evitar emocionarse al recomendarle a la joven: "Haz caso a tu madre, que te cuida. Yo ya no tengo madre y no me puede cuidar". La cámara, basada en un testimonio real cuenta con el respaldo de la Federación Española de Asociaciones de Ayuda y Lucha contra la Anorexia y la Bulimia.

En el plató, Shaila ve la cámara oculta junto a Toñi Moreno con quien habla sobre su nueva vida en España y de las primeras Navidades junto a sus hermanos desde que falleció su madre, Rocío Dúrcal, a la que recuerda como "una niña eterna a la que gustaba celebrar sus cumpleaños con una piñata de Piolín". Shaila también nos muestra su lado más divertido y su habilidad para rapear. El programa la sorprende con la actuación de uno de sus ídolos musicales: el afamado DJ de música electrónica, DJ Nano.

Otros artistas invitados son Falete y Paco Candela, que ponen la nota musical a la noche.

En la segunda cámara oculta de la noche se aborda la violencia machista entre jóvenes. En esta cámara basada en un testimonio real y avalada por la asociación Stop Violencia de Género Digital, una joven está sometida al control y al acoso de su pareja. Una situación ante la que reacciona la influencer Amor Romeira, que demuestra así ser una mujer maravillosa.

La tercera cámara oculta, avalada por la Asociación de Familias de Menores Trans, CHRYSALLIS, pone el foco en la discriminación que sufren los menores transexuales y sus familias. En ella, "Gente Maravillosa" recrea una situación en la que una mujer le cuenta a una amiga que su hijo se siente una niña y recibe como respuesta la incomprensión y el rechazo de ésta. Un desplante que no se queda sin respuesta.