Solía hacerlo acompañado por un par de estudiantes, con los que hablaba de las complicadas tramas que se encontraban en dichas películas. Bohr había desarrollado una teoría en la que explicaba el “porqué a pesar de que el villano siempre desenfunda primero, el héroe es más rápido y consigue matarle”. Y ello consiguió demostrarlo en una de sus clases en la que simularon los típicos duelos del viejo oeste y, con dos revólveres de juguete y sus correspondientes cartucheras, él interpretó el papel de héroe, siendo mucho más rápido en desenfundar y disparar que todos sus alumnos.