Se les conoce como "la generación inquilina" porque de los pocos que se han independizado, un 15,2%, el 60% está de alquiler y un tercio comparte piso
La emancipación juvenil se encuentra en mínimos históricos. Apenas el 15% de los jóvenes puede irse de la casa familiar para independizarse. Se le llama "la generación inquilina" porque de los pocos que se han independizado, un 15,2%, el 60% está de alquiler y un tercio comparte piso. Porque si viven solos tienen que destinar el 92,3% de su sueldo a la vivienda y a esto se suma la subida de precios, mucho más rápida que los salarios.
Por eso el acceso a la propiedad es muy complicado porque persiste la precariedad, a pesar de que bajó la tasa de paro juvenil al 19%, el valor más bajo desde 2007. Por eso el Consejo de Juventud de España reclama al Gobierno la aplicación efectiva de la Ley por el derecho a la vivienda y la reforma del bono de alquiler.
Otro dato del perfil de nuestros jóvenes es que el 36% de los que están ocupados están sobrecualificados para el puesTo que ocupan y un 35% compaginan el empleo con los estudios, especialmente las mujeres. Y un 30% de los jóvenes están en riesgo de pobreza o exclusión social.