El papa sale del hospital después de cuatro días ingresado: "Todavía estoy vivo"

"Todavía estoy vivo". Así, con su humor habitual, ha respondido el papa Francisco a las preguntas de los periodistas que lo esperaban a su salida del Hospital Universitario de Roma.

El pontífice ha estado cuatro días ingresado en el centro, aquejado de una bronquitis. Hasta allí fue trasladado el pasado miércoles, después de la tradicional audiencia de ese día. El Vaticano informó entonces que el papa llevaba varios días padeciendo dolor en el pecho y que fue llevado al hospital por precaución.

A la salida del centro médico, numerosas personas han aplaudido a Francisco y se han acercado a él. Entre ellas se encontraban unos padres que habían perdido a su hija la noche anterior.

Él mismo ha confirmado que presidirá la misa de Domingo de Ramos en la Basílica de San Pedro, aunque será oficiada por varios cardenales.