Primera regla: elegir simple, sin procesar mejor, y si lo está: con etiqueta corta, cuanto menos ingredientes, mejor.
Segunda regla: no caer en el miedo químico, aditivos o conservantes son útiles y las normativas, exigentes.
Tercera: los superalimentos no existen. Y cuarta regla: primar legumbres, fruta, verdura, pescado y carne, blanca mejor.
A todos nos gusta comer sano, por eso es importante leer bien las etiquetas cuando compramos alimentos envasados. Boticaria García, una farmacéutica convertida en influencer, ha publicado una guía donde aclara cómo entenderlas.
"El jamón de york no existe" es el título de esta guía contra mitos y noticias falsas sobre nutrición, que alude al fiambre de baja calidad, una de las bestias del súper.
Esta doctora en farmacia es referente en ciencia y comida. Nos hace un resumen: primera regla: elegir simple, sin procesar mejor, y si lo está: con etiqueta corta, cuanto menos ingredientes, mejor.
Segunda regla: no caer en el miedo químico, aditivos o conservantes son útiles y las normativas, exigentes. Tercera: los superalimentos no existen.
Y cuarta regla: primar legumbres, fruta, verdura, pescado y carne, blanca mejor, pero sin ser talibanes, tenemos motivos. Consejo final: no dejarse llevar por modas, y en el comer, menos.